Hoy es un día
especial para todos los corredores apasionados del mundo, hoy se celebra el
maratón más importante, en el que solamente unos pocos afortunados
(suena irónico siendo que 30,000 corredores estarán presentes en la línea de
salida) pueden participar en esta fiesta, ese selecto grupo de corredores
conforma la elite mundial de atletas maratonistas, pues cada uno ganó la
oportunidad de participar dando la marca en otra prueba de 42.195km que otorgue
el pase a Boston, no importa pagar los $225.00dls de inscripción, no importa
romper el cochinito para pagar un viaje a Massachusetts y no importa pedirle
prestado a familiares y amigos para pagar el hotel, lo que importa es el honor
de cruzar la meta frente al número 665 de la calle Boylston, lo que sólo unos pocos
tienen el privilegio de hacer.
Las mujeres serán
las primeras en tomar la salida cuando el reloj marque las 9:32am hora local,
pero esto no siempre fue así, Boston juega un rol muy importante en la historia
del maratón femenino pues antes no se permitía la participación de la mujer en
cualquier maratón del mundo.
Dos de ellas juegan
un rol fundamental en la historia del maratón; Roberta Gibb y Katherine
Switzer. Roberta se convirtió en la primer mujer en correr el maratón de Boston
en el año 1966, aunque no fue de manera oficial, pues no contaba con número de
competidor. A Roberta se le reconoce el haber terminado en el primer lugar
entre 1966 y 1968 pero de manera NO oficial. Fue en el año de 1967 cuando la
historia cambio por completo, Katherine Switzer una periodista y atleta de la
Universidad de Syracuse engañó a todos los organizadores realizando su registro
como “K.V. Switzer”, se presentó en la línea de salida con un pants holgado
dejando de lado el toque femenino y hasta los tenis que utilizó ése día eran
para hombre, pues en ésa época el mercado femenino no tenía impacto. A mitad de
la carrera, un oficial detectó la presencia de una mujer entre los corredores,
se trataba de Katherine portando el número 261, corrió hacia ella y la jaloneó
para sacarla del recorrido, su novio corría detrás de ella por lo bloqueó al
oficial con su hombro mandándolo fuera del camino. Katherine completó el maratón
con los pies sangrados y llenos de ampollas pero con un número de competidor
oficial. El momento fue captado por un fotógrafo y la imagen está considerada
entre las “100 fotografías que cambiaron al mundo”.
Para el año de 1971
la Unión Amateur Atlética (A.A.U. por sus siglas en inglés) aceptó la
participación de la mujer en competencias de larga distancia, fue en el año de
1972 que oficialmente se permitió el registro de mujeres en el Maratón de
Boston, 8 fueron las atletas en tomar la línea de salida y las 8 completaron el
recorrido, siendo Nina Kuscsik de los Estados Unidos la primer mujer en
finalizar oficialmente el maratón de Boston en un tiempo de 3:10:26
Hoy en día Switzer
es una leyenda en el running, además de abrir las puertas a las mujeres en éste
tipo de competencias ganó el maratón de Nueva York en 1974 y fue segunda en
Boston en 1975, es una aclamada conferencista, tiene su propio maratón en
España donde únicamente corren mujeres y es una empresaria exitosa que dice
convertir cosas negativas en oportunidades.